NOSOTROS COMO LOS PATRIOTAS DE 1810, SOMOS HOMBRES, MUJERES Y NIÑOS QUE COINCIDIMOS EN TIEMPO Y ESPACIO Y, AL IGUAL QUE ELLOS, TENEMOS EN NUESTRAS MANOS LA POSIBILIDAD Y LA RESPONSABILIDAD DE SEGUIR CONTRIBUYENDO PARA CONSEGUIR LA PATRIA QUE QUEREMOS SER.