"PIDAN Y SE LES DARÁ..." Lc 11,9
Pastoral Educativa
Querida comunidad educativa:
¡Muy buenos días! Los invitamos a ponernos en presencia de Dios un día
más para comenzar con la oración de hoy.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Lectura del Santo Evangelio según San Lucas 11, 5-13
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
“Supongan que alguno de ustedes tiene un amigo que viene a medianoche a
decirle: ‘Préstame, por favor, tres panes, pues un amigo mío ha venido de viaje
y no tengo nada que ofrecerle’. Pero él le responde desde dentro: ‘No me
molestes. No puedo levantarme a dártelos, porque la puerta ya está cerrada y
mis hijos y yo estamos acostados’. Si el otro sigue tocando, yo les aseguro
que, aunque no se levante a dárselos por ser su amigo, sin embargo, por su
molesta insistencia, sí se levantará y le dará cuanto necesite.
Así también les digo a ustedes: Pidan y se les
dará, busquen y encontrarán, toquen y se les abrirá. Porque quien pide, recibe;
quien busca, encuentra y al que toca, se le abre. ¿Habrá entre ustedes algún
padre que, cuando su hijo le pida pan, le dé una piedra? ¿O cuando le pida
pescado, le dé una víbora? ¿O cuando le pida huevo, le dé un alacrán?
Pues, si ustedes, que son malos, saben dar
cosas buenas a sus hijos, ¿cuánto más el Padre celestial les dará el Espíritu
Santo a quienes se lo pidan?’’
Palabra del Señor
En el
Evangelio de hoy el Señor nos sigue enseñando sobre la oración, sobre cómo
debemos orar. Y más que nada nos enseña que la oración debe ser confiada e
insistente. Cuando necesitemos algo no tenemos que dudar de pedir lo que nos
hace falta, y tenemos que hacerlo con insistencia y en cualquier momento.
Jesús nos dice que Dios es buen
Papá que ama a sus hijos y que da generosamente a los que le piden.
“Pidán y se les dará, busquen y encontrarán, llamen y se les abrirá.
Porque el que pide,
recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre.
“La oración del Padre nuestro, la oración insistente y confiada, es la oración
de quien cree y confía en este Dios que es
el Padre Bueno que siempre escucha”.
La oración confiada e insistente
siempre resulta y es eficaz, y más aún, como nos dice Jesús nos da siempre el Espíritu
Santo, la fuerza que nos permite vivir y anunciar el Reino, la presencia del
Dios vivo.
“…la oración, ante un problema,
una situación difícil, una calamidad, es abrir la puerta al Señor para que
venga. Porque Él hace nuevas las cosas, sabe arreglar las cosas, ponerlas en su
sitio. Rezar es esto, abrir la puerta al Señor para que pueda hacer algo. Pero
si cerramos la puerta al Señor, no puede hacer nada”. (Papa Francisco)
¿Cómo es tu oración hacia Dios?
¿Tu oración es confiada e insistente? ¿Cuántas veces en tu vida experimentaste
la bondad de Dios? ¿Qué pasa cuando sentís que tu oración ha sido escuchada?
Porque seguramente muchas veces Dios escuchó tus oraciones y eso te ayudo a
crecer más en confianza con él.
Que el Señor nos regale la Gracia
de experimentar siempre su amor de Padre Bueno, y como hijos poder compartir y
estar con Él a solas con Quién sabemos que nos Ama, para ser siempre testigos
de su Amor, de su fidelidad, de su Misericordia.
Que tengas lindo día, Dios te bendiga.